domingo, 26 de diciembre de 2010

Caminos cruzados o del porqué no rifa ser geminiano en Navidad



Hace menos de una semana tenía el ánimo por los suelos, algo muy natural cuando los caminos de tu sendero se cruzan y las flechas que deberían indicarte el camino sólo te señalan a ti.

Hoy no tengo el ánimo bajo, aunque tampoco soy feliz, simplemente tengo la certeza de que por el momento tomaré una sola vereda, improvisaré un poco más, suspiraré cuando sea necesario, escucharé y aceptaré.

Necesito, indudablemente, más tiempo para mí, seguir acomodando, buscando, respondiendo, encontrando, pero por fortuna ya tengo la mente más clara, algo casi imposible en un geminiano. Esa explicación estaba en un post anterior que, por el momento, no verá la luz porque además de que estaba bien azotado, pues ya no refleja del todo mi estado de ánimo.

Y bueno, temo que esta vez no tengo post sobre lo horrible que es la navidad, o lo feo de los intercambios y demás reflexiones navideñas, pero tengo dos soluciones: una, pueden leer mis post decembrinos del pasado y convertirse en grinches; o dos, pueden ir a ver los cuentos antinavideños en la Capilla, en Coyoacan, para convertirse en grinches (ambos modelos pueden comerse a los niños).

Así que, mis queridos hombres y mujeres de bien qué bueno que ustedes no son geminianos y tienen esta remodelación mental de fin de año... cada año. Les deseo lo mejor y así.


Hay pocas fotos donde no aparezcan zorras si pones gemelos+navidad ¬¬


lunes, 6 de diciembre de 2010

Decisiones a mi

Acabo de leer como 2 años de mi vida en entradas de post. Sigo siendo bien divertida y buenaondita, sigo con mis dilemas existenciales y lo que es más importante sigo pseudotorturandome con cuestionamientos de fácil respuesta.

Y, pues bueno, sigo en encrucijadas y justo ahora, en el siempre encantador proceso de tomar decisiones (que por cierto, nunca escribo bien, ya saben, eso de mi problema con la s y la c). Esta vez no dejaré que todo fluya, más bien le haré una propuesta a la vida como la impro me ha enseñado a ver qué resultados tengo, si es o no un remate exitoso.

Queridos clientes frecuente de este su blog de confianza, ahora les tengo 2 tareas: atrévanse a tomar decisiones e imagínense que este post es el de noviembre.